Edición 27Investigación

Preparar a los maestros para formar ciudadanos del siglo 21

Existe un consenso creciente con relación a que para participar cívica y económicamente en un mundo que cambia rápidamente es necesario que las escuelas apoyen a los alumnos a desarrollar un amplio espectro de capacidades, tanto cognitivas como socio-emocionales. Existe también cada vez más conciencia en relación con que el aumento de la calidad y de la relevancia educativa requiere de maestros altamente capacitados. Es por ello que los Gobiernos y otras instituciones invierten enormes esfuerzos en el desarrollo profesional docente. A pesar de ello, en encuestas a directores de escuela en varios países del mundo llevadas a cabo por la OCDE, los directores señalan la baja capacidad docente como una de las principales barreras para ofrecer una educación de calidad 1.

El ayudar a descifrar el misterio de como asegurar que los esfuerzos de formación profesional docente se traduzcan en pedagogías efectivas que permitan a los estudiantes desarrollar las competencias necesarias para vivir en el siglo 21 es el propósito del último libro de la Iniciativa Global de Innovación Educativa que dirijo en la Universidad de Harvard.Publicado originalmente en ingles con el titulo ‘Preparing Teachers to Educate Whole Students’ por Harvard Education Press a fines del ano 2018, el libro ha sido traducido al español y publicado en tres diferentes ediciones, hasta la fecha, por CREFAL en Mexico, la Universidad de Alicante en España y por la secretaria de educación del Estado de Mexico. La mas reciente edición de la Universidad de Alicante tradujo el titulo como Preparar a los maestros para educar integralmente a los estudiantes. El libro puede descargarse gratuitamente aquí https://web.ua.es/es/ice/ediciones-i3ce/ediciones-educacion.html y aqui https://www.researchgate.net/publication/331498973_Preparar_maestros_para_estudiantes_integrales_Preparar_maestros_para_estudiantes_integrales

La Iniciativa Global de Innovación Educativa (GEII por las siglas del nombre en inglés: Global Education Innovation Initiative) de la Escuela de Postgrado en Educación de la Universidad de Harvard, es un proyecto de investigación y acción en el cual participan instituciones de varios países que comparten un compromiso por apoyar procesos de mejora que resultan necesarios para las escuelas y los sistemas educativos, particularmente en las escuelas públicas, con el fin de que ayuden a los estudiantes a desarrollar las aptitudes y competencias que les permitirán vivir una buena vida, además de contribuir al desarrollo sostenible de sus comunidades y el mundo.

En un proyecto de investigación previo, sintetizamos el conocimiento existente sobre las competencias que resultan necesarias para vivir y participar en el siglo XXI, utilizando una taxonomía para analizar los marcos curriculares nacionales de Chile, Colombia, India, México, Singapur y los Estados Unidos. En esa investigación, arribamos a la conclusión de que las aspiraciones curriculares se habían expandido en esos países y que, si bien los fines y objetivos de tipo cognitivos prevalecían como objetivos principales, también incluían como objetivos que los estudiantes desarrollen capacidades para colaborar con otros y autocontrolarse, aspectos que algunos denominan habilidades interpersonales e intrapersonales, además de promover el desarrollo social y emocional.

Otra conclusión del libro Teaching and Learning for the Twenty-First Century, (publicado en español por el Fondo de Cultura Económica con el título Enseñar y Aprender en el Siglo 21) resultado de nuestra investigación previa, fue que el desarrollo profesional de los docentes es fundamental para ayudar a traducir las aspiraciones curriculares en nuevas oportunidades de aprendizaje y enseñanza que tienen lugar en las aulas y en las escuelas.

Para avanzar en el conocimiento sobre cómo debemos apoyar a los maestros para que contribuyan a desarrollar competencias que les permitan impulsar una educación integral, realizamos el proyecto de investigación cuyos resultados presentamos en este libro. En este proyecto estudiamos programas educativos que tenían como objetivo apoyar a los maestros para que proveyeran una educación más holística a sus estudiantes, trascendiendo el enfoque tradicional que se centra en el desarrollo de conocimientos y habilidades en las asignaturas básicas de lenguaje, matemática y ciencia, para incorporar también el desarrollo del carácter y capacidades de los alumnos para colaborar con otros. Nos propusimos estudiar cómo estos programas desarrollaron las capacidades de los maestros, líderes escolares y otros miembros de la comunidad escolar con el objeto de apoyar a los estudiantes en el desarrollo de capacidades cognitivas, interpersonales e intrapersonales, con el fin de educarlos de manera holística. Nuestro objetivo fue identificar cómo se conceptualizaron las prácticas organizacionales y de instrucción que apoyaban la preparación de maestros para ofrecer una educación integral en los programas estudiados, cómo apoyaron a los maestros para desarrollar las competencias para desarrollar tales capacidades, y qué condiciones organizacionales al interior de las escuelas y de los sistemas educativos facilitaron el diseño e implementación de estos programas.

Analizamos programas de formación profesional docente en Chile, China, Colombia, India, México, Singapur y los Estados Unidos que han logrado transformar con éxito la cultura de las escuelas y las prácticas de enseñanza para avanzar una educación multidimensional, incluyendo los dominios cognitivo, emocional y social.

Los programas que estudiamos incluyen la Escuela Activa Urbana (EAU) en Colombia; el Programa de Educación en Ciencias Basada en la Indagación (ECBI) en Chile; el programa UNETE en México; el programa de desarrollo profesional basado en el distrito de Qingyang, China; el programa Dream-a-Dream en India, además de “EL Education” en los Estados Unidos. Tienen orientaciones curriculares aparentemente diferentes, incluyendo la enseñanza de las ciencias basada en la indagación, educación para la ciudadanía, alfabetización tecnológica, materias académicas fundamentales, y desarrollo del carácter. Sin embargo, más allá de tal variación en el enfoque curricular estos diversos programas comparten características en cuanto a sus objetivos generales y a la forma en que los alcanzan. Además, dos de los programas que estudiamos se enfocan en el desarrollo individual de maestros y directores, sin estar directamente alineados con actividades instruccionales que promuevan competencias estudiantiles: este es el caso del programa Dream-a-Dream en India y el Programa Líderes en Educación (LEP) en Singapur.

El estudio identifica once aspectos clave para apoyar el desarrollo de las capacidades de maestros y líderes para promover la educación del siglo XXI:

  • Los programas de desarrollo profesional reflejan una concepción del aprendizaje de adultos como socialmente situado y que responde a las necesidades actuales de los maestros con respecto a los aprendizajes. Esta característica contrasta notoriamente con el tipo de programas de desarrollo profesional que se encuentran disponibles para la mayoría de los maestros, como señalan los resultados del estudio TALIS. Los programas que estudiamos tienen como objetivo desarrollar las capacidades de los docentes para responder a las necesidades que ellos mismos han identificado para sí, e influir no solo en las capacidades individuales, sino también en el contexto social de las escuelas, al incluir a muchos adultos cuyas funciones se cruzan, como lo serían otros maestros, los administradores escolares y ocasionalmente administradores fuera de la escuela.
  • Este tipo de actividades de desarrollo profesional implica oportunidades sostenidas y extensas para que los maestros desarrollen capacidades, durante al menos un año escolar completo o que abarquen varios años escolares, lo que contrasta con lo que usualmente se organiza, cursos cortos fuera de la escuela. Ninguno de los programas estudiados en este libro son cursos o talleres cortos, aunque algunos cursos cortos pueden ser parte de una cartera más amplia de oportunidades para la formación. Los programas reconocen que las carreras de los docentes se desarrollan a la par de trayectorias, y que las actividades de desarrollo profesional es un proceso estructurado por etapas, a través del cual las personas van progresando. Estas trayectorias pueden o no existir como estructuras formales en los sistemas en donde operan estos programas.
  • Las modalidades de desarrollo profesional examinadas en este libro son diversas. Incluyen actividades basadas en el estudio independiente de material nuevo, discusión con colegas y otros, acompañamiento individual o grupal, demostraciones con prácticas innovadoras, proyectos de investigación independientes y oportunidades para la reflexión.
  • El currículo de los programas considera una composición de diferentes capacidades, desde un enfoque amplio que busca ayudar a los estudiantes a desarrollar capacidades, hasta una identificación muy desagregada de pedagogías específicas y prácticas de instrucción que pueden ayudar a los estudiantes a adquirir esas habilidades. Los programas apuntan a desarrollar la autonomía y la agencia de los docentes como profesionales, una capacidad de aprender independientemente, un deseo por lograr un aprendizaje continuo y con mayor efectividad, además de la motivación intrínseca para luchar por una docencia de excelencia. Si bien los programas no se basan de manera consistente en enfoques de dominio de aprendizaje (en inglés: mastery learning), en todos se espera que los maestros adquieran competencias probadas y que vean el proceso de obtención de tales competencias como algo gradual. Los programas requieren ciclos repetidos de: acceso a nuevos conocimientos, la puesta en práctica de dichos conocimientos, recibir retroalimentación sobre estas prácticas modificadas, permitir la reflexión sobre esta nueva práctica, e interactuar en un ciclo con un dominio incremental de las nuevas prácticas de instrucción.
  • El currículo de los diversos programas refleja una perspectiva del aprendizaje que incluye habilidades cognitivas en interacción con aptitudes y habilidades socioemocionales. Los programas rara vez son simples enfoques para desarrollar herramientas, aunque incluyen oportunidades para que los maestros puedan ver la relación que existe entre las nuevas formas de enseñanza con los valores que son importantes para ellos, y que se alinean con propósitos sociales más amplios de los estudiantes y las comunidades. En términos de habilidades sociales, los programas ayudan a los maestros a aumentar su capacidad para comunicarse, colaborar, negociar y liderar.
  • Las actividades de desarrollo profesional incluyen el conocimiento de rutinas, protocolos y prácticas de instrucción claras, donde los maestros observan en la práctica nuevas formas de instrucción o evaluación. Los programas se basan en protocolos, kits de herramientas, marcos, videos con lecciones de demostración o pedagogías que ayudan a escalar los programas con fidelidad en una variedad de contextos.
  • Los programas se basan en una combinación de oportunidades de aprendizaje situadas en el contexto de las escuelas donde los docentes laboran. Estos incluyen el acompañamiento en las escuelas y en comunidades de desarrollo profesional al interior de las escuelas, con oportunidades para que los maestros hablen con colegas en diferentes escuelas y con roles distintos a la enseñanza dentro del aula.
  • Para apoyar las actividades de desarrollo profesional intensivas y sostenidas que promueven los diversos programas estudiados, las organizaciones consolidaron asociaciones con instituciones fuera de las escuelas para acercar distintos tipos de recursos. Todos estos programas dependen de la creación de nuevas formas para involucrar a los padres y a las comunidades escolares, todo por el aprendizaje de los estudiantes.
  • Los programas consideran la práctica docente como situada en organizaciones y contextos sociales específicos y, en general, adoptan un enfoque escolar integral, más que optar por ayudar individualmente a maestros para mejorar sus capacidades. Como parte del objetivo de crear condiciones que generen la presencia de un número mayor de prácticas docentes innovadoras y ambiciosas, en los programas estudiados se buscó explícitamente cambiar la cultura organizacional y, a menudo, las estructuras y actividades escolares, por ejemplo, ampliando el tiempo de enseñanza, reorganizando las oportunidades de aprendizaje en las diferentes disciplinas, abriendo espacios dentro de la jornada escolar para llevar a cabo actividades de desarrollo profesional, o bien ampliando las oportunidades de aprendizaje fuera de la escuela. Los esfuerzos para desarrollar una visión compartida entre todo el personal escolar acerca de la ampliación de objetivos para todos los estudiantes, por ejemplo, que “todos los estudiantes tengan éxito”, o que “todos llegaremos a la cima”, son un elemento común de estos procesos de formación.
  • Todos los programas desarrollan capacidades docentes para promover pedagogías que tienen el objetivo de desarrollar competencias que no se evalúan formalmente en la escuela o el sistema escolar. En este sentido, los programas desafían la noción de que “lo que se mide es lo que se hace”, lo que sugiere que los maestros pueden tomar decisiones sobre qué y cómo enseñar que pueden trascender las estructuras formales de rendición de cuentas de las escuelas.
  • Todas las organizaciones que apoyan los diversos programas modelan una cultura de aprendizaje continuo. Las organizaciones se acercan a las escuelas con una mentalidad de indagar, para lo que establecen un diálogo con el personal escolar sobre sus objetivos de aprendizaje, utilizan diversas formas de retroalimentación para evaluar si su trabajo está logrando los resultados previstos, e implementan medidas para corregir el curso de las actividades y generar una mejora continua en sus actividades.

En síntesis, este estudio aporta claves para desarrollar programas que efectivamente permitan a los maestros brindar una educación relevante y de más calidad a sus estudiantes. La discusión de estas ideas por los diversos grupos que pueden incidir en dicha formación en Colombia y en otros países, tanto desde el sector público como privado, permitirá contextualizar estas ideas y que las mismas animen el necesario liderazgo colectivo para que todos los estudiantes tengan oportunidades efectivas de desarrollar las capacidades esenciales para participar cívica y económicamente en un mundo en el que los rápidos cambios y nuevos desafíos requieren de toda la imaginación, creatividad, conocimiento, capacidad de colaboración y conocimiento de sí mismos de todas las personas. RM

1. Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, TALIS 2013 Results: An international perspective on teaching and learning (Paris: OECD, 2014).

Fernando Reimers

Profesor de Políticas Educativas y Director de la Global Education Innovation Initiative, Harvard Graduate School of Education. Profesor de la Fundación Ford de Práctica en Educación Internacional.

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